En Cruz del Eje, más de 30 estudiantes del I.P.E.T. 253 “Juan Domingo Perón” lograron transformar una moto en desuso en un vehículo eléctrico, un innovador proyecto que ya ha pasado por tres generaciones de jóvenes en la escuela.
La iniciativa, que se originó en el taller de Operación y Mantenimiento de Equipos Electromecánicos en 2019, se ha convertido en un símbolo de creatividad y compromiso ambiental.
El proyecto nació cuando el profesor Jonathan Romero, docente en la institución desde hace seis años, encontró una antigua moto Yuki de 50 cc abandonada en el depósito de la escuela.
“Con los estudiantes tratamos de pensar qué utilidad podríamos darle. Surgió la idea de convertirla en una moto eléctrica, y aunque al principio les pareció ambicioso, los alumnos se entusiasmaron con el desafío”, explicó Romero, quien trabaja en el proyecto junto al profesor Federico Molina.
En 2022, luego de retomar el trabajo pausado por la pandemia, el equipo de estudiantes y docentes logró poner en funcionamiento la moto, bautizada como “Electro-N”.
El vehículo está equipado con cinco baterías de gel de 12 voltios y 7 amperes cada una, permitiendo un alcance de entre 40 y 50 kilómetros a una velocidad de hasta 50 km/h.
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Actualmente, las baterías se recargan en una hora y media mediante un cargador convencional.
Innovación y energía limpia: el futuro de la Electro-N
El siguiente objetivo del proyecto es hacer que la Electro-N sea autosustentable.
Los estudiantes y profesores planean instalar paneles solares en la moto, lo que permitiría que las baterías se recarguen mientras el vehículo está en movimiento, eliminando la necesidad de conectarse a la red eléctrica.
Además, el equipo busca incorporar baterías de litio para mejorar la eficiencia energética.
La visión a largo plazo no se detiene allí: el grupo también investiga la posibilidad de desarrollar un vehículo impulsado por hidrógeno, utilizando electrólisis para producir un combustible limpio y sin emisiones.
“Este proyecto es motivo de orgullo para la escuela, ya que casi 70 alumnos han participado a lo largo de los años. Además de enseñarles habilidades técnicas, buscamos que los estudiantes comprendan la importancia de la sustentabilidad y la innovación en energías renovables”, destacó el profesor Romero.
Sin emisión de gases contaminantes ni ruidos, la Electro-N es un ejemplo inspirador del poder de la educación técnica en el avance hacia un futuro más sostenible y ecológico.
