Dos emprendedoras locales decidieron unirse y fusionar sus ideas en Funky, un proyecto textil que ofrece una línea de prendas realizadas con fibra de cáñamo.

Además, crean diseños únicos con un estilo distintivo que alude a distintas bandas y artistas de rock.

Se trata del emprendimiento de Alfonsina Gorno y Lucía Olea, quienes hicieron su primera aparición al público durante el recorrido peñero en Villa María y sorprendieron a los ciudadanos con sus novedosos productos textiles.

Funky se distingue por utilizar fibra de cáñamo, una fibra textil con características similares al algodón, pero cuyo impacto ambiental es mucho menor.

Entre sus características, se encuentra que la fibra de cáñamo es versátil y resistente, permite tratamientos innovadores que lo asemejan a otros tejidos suaves como la seda y el lino e incluso a otros más duros como la arpillera.

A su vez, la fibra de cáñamo produce una mayor cantidad de fibras. Comparado con el algodón, su producción se incrementa en un 220%.

No requiere de pesticidas y fertilizantes y conlleva un consumo de agua mínimo.

Fusionar creatividad e ideas

Al momento de comentar la historia de Funky, Alfonsina mencionó: “Durante la pandemia comencé a vender remeras rockeras que compraba a negocios mayoristas. Así empecé a darle forma a esta línea. Después, surgió un proyecto para adquirir máquinas industriales entre varias diseñadoras, en mi caso yo soy artesana, y empezamos a trabajar en conjunto con Lucía”.

Cabe destacar que Funky también presenta una colección de noche (@funky_vestuarios) donde realizan vestuarios para escuelas de teatro, danza y colegios.

“Esta línea fue lo primero que hicimos”, dijo Gorno, y continuó: “A partir de allí, vimos que nos llevamos bien, funcionamos en equipo y vamos jugando con distintas líneas”.

A su turno, Lucía precisó que durante la pandemia, y mediante una compra cooperativa, adquirió la tela de cáñamo.

“Tiene una cuestión sustentable de fondo, el hilo se produjo en la India y este año decidimos activar este proyecto. Así fue como creamos Funky con remeras rockeras con ilustraciones propias y la línea de cáñamo”, describió.

Teñido artesanal

Desde el emprendimiento textil revalidaron el proceso de teñido artesanal que realizan en sus prendas.

Lucía y Alfonsina precisaron que, en primer lugar, llevan adelante la creación de los distintos diseños de indumentaria (remeras, musculosas, vestidos y pantalones) y, posteriormente, dan lugar al teñido artesanal.

“Es un proceso para el cual utilizamos anilina, pero estamos pensando en incorporar tintas naturales. Por el momento, estamos investigando sobre el tema, experimentando y jugando”, afirmaron.

Asimismo, Alfonsina resaltó: “A las dos nos gusta más o menos el mismo estilo y también nos dividimos las tareas según lo que más sabe una o la otra; por ejemplo, Lucía es más fan de lo artesanal y el teñido y yo de la moldería. Esto es fundamental para poder emprender, que el equipo se lleve bien”.

El cáñamo y sus cualidades

En cuanto a la línea de fibra de cáñamo, Olea indicó que “es un textil que se utilizaba hace mucho tiempo, pero después fue prohibido en la época de la dictadura”.

Igualmente, la emprendedora apuntó: “Hay que destacar que este tipo de tela es biodegradable, o sea que cuando dejamos de utilizar esa prenda y se va a la basura, se degrada porque es de una fibra natural. En lo que respecta a su capacidad para ser teñida, la fibra permite un buen agarre de los tintes. No se van fácilmente con los lavados, por lo que tu ropa parecerá nueva como el primer día”.

“El cáñamo presenta otros beneficios”, mencionó Lucía y enumeró: “Cuando utilizamos una prenda tiene protección de los rayos UV, absorbe la humedad, es antimicótica y antibacteriana”.

“De este modo, al transpirar la tela no permite el mal olor por lo que se reduce la frecuencia de lavado, lo que se traslada a un ahorro también de agua”, puntualizó.

Por su lado, Gorno relató: “Cada prenda es única, no hay otra igual por más que queramos porque el diseño y el teñido artesanal no lo permiten. Además, las ilustraciones son propias realizadas por una artista local muy joven, Sofía Tumas, quien las lleva a cabo a mano alzada y a partir del boceto hacemos su digitalización”.

“La libertad de poder crear”

Tras consultarles por los desafíos que debieron atravesar, las emprendedoras detallaron aquellos vinculados a la materia económica: “La compra de insumos y luego el traslado a los precios del producto final son siempre un tema, pero siempre tratamos de darle la vuelta y salir adelante”.

“Nos reconforta la grata respuesta que hemos tenido por parte del público, muchos comentarios positivos que nos incentivan a seguir adelante, jugando y creando distintas líneas. Y en el caso de nuestra colección de cáñamo, estamos seguras de ser las únicas en contar con esta tela en Villa María y en Córdoba, por lo que invitamos a la gente a que conozcan las prendas de Funky”, concluyeron.