La creciente accesibilidad a billeteras virtuales, aplicaciones de pago, cuentas bancarias gratuitas universales y hasta el cobro de beneficios sociales por medios electrónicos hace que la educación financiera se haya convertido en tópico de conversación entre amigos y familiares.
Cada vez con menos frecuencia vemos a personas solicitando colaboración en cajeros automáticos y, por el contrario, proliferan los carteles en comercios para pagos con código QR, transferencias o abonos con tarjeta de crédito.
La tecnología vinculada al pago y cobro de activos avanza (acelerada por la pandemia) pero muchas de las decisiones que tomamos con nuestro dinero no están del todo fundadas. Al menos así lo demuestra un informe publicado por el Banco Central de la República Argentina (BCRA) y el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).
El análisis -que recolecta información hasta 2017- da cuenta de que Argentina ocupa el puesto 31 de 39 en países en relación a conocimiento financiero. Además, el puntaje de educación financiera posiciona a nuestra tierra en el lugar 37 de 39 y a nivel regional nos ubica en la última posición por debajo de Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú.
Este año el debate lo disparó el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta cuando en sus redes sociales, el jefe de Gabinete, Felipe Miguel, publicó: “El 21 de febrero empiezan las clases en CABA. Con prácticas en ambientes laborales y educación financiera”.
Sin embargo, algunas experiencias esporádicas ya vienen realizándose desde antes. En 2017 el BCRA realizó una prueba piloto en Córdoba denominada “Financiación de un proyecto: el viaje de egresados” y en 2018 en Neuquén. Estas pruebas formaron parte de lo que se llamó Habilidades Financieras para la Vida e incluyó una serie de materiales didácticos.
Marcelo Coppari, director del IPEM 147 Manuel Anselmo Ocampo de nuestra ciudad, refuerza la concepción de que en la provincia ya se viene trabajando con esta medida: “El sistema de pasantías en la provincia de Córdoba, y nosotros particularmente como educadores públicos, lo tenemos contemplado. Particularmente los alumnos que forman parte de las pasantías Bancor tienen un curso que ronda todos los aspectos vinculados a educación financiera”.
Desde la institución educativa aducen trabajar bajo la modalidad de talleres o ateneos tópicos que son parte de la coyuntura de los argentinos: “Incluso el año pasado nosotros hemos trabajado con el tópico criptomoneda. Tiene mucho que ver la mentalidad de trabajo y apertura del docente hacia nuevos aspectos curriculares”.
En términos macro y microeconómicos, discutir aspectos como mejorar los hábitos financieros diarios es bien recibido por especialistas. Alejandro Pereyra, economista y docente de la Universidad Nacional de Villa María, manifestó: “Es un planteo útil que un adolescente tenga en sus últimos años una aproximación a lo que son los conceptos básicos del manejo financiero. Que no solo le va a servir en su vida laboral sino también en su vida personal”.
Además, agregó: “Cuando hablamos de educación financiera nos referimos a hábitos económicos, cómo debe administrar sus propias finanzas, cómo encarar un proyecto”.
Si bien no se ha hecho público un plan de estudios detallado, algunos organismos ya proponen tópicos a abordar tales como ¿Para qué sirve el dinero?, ¿Cómo y por qué se debe ganar, gastar y ahorrar?, el consumo responsable, para los establecimientos educativos primarios. Y un conocimiento más profundo para estudiantes secundarios: ahorro y endeudamiento, riesgo y diversificación, cómo funcionan y cómo utilizar tarjetas de débito y crédito, nociones básicas sobre economía, entre otras.
Otro de los aspectos del debate ronda a quiénes serán los responsables de dictar el contenido y cuál será la mirada. Los sindicatos educativos señalaron seguir con atención que la mirada sea sesgada solamente a los intereses de empresas privadas. Al respecto Coppari señaló: “Si estos contenidos los van a dar personas que no están dentro del sistema educativo es tal vez discutible. Lo que si hacemos nosotros es que las personas que se desempeñan en la esfera privada se incorporen a trabajos de taller. Esto se hace, hemos tenido a representantes de Volkswagen, integrantes de cooperativas argentinas, entre otros”.