Por primera vez, desde Villa María partió hacia Nueva Zelanda un cargamento de bebida vegetal. Se trata de una exportación que concretaron las firmas Nutrin, de Ticino, conjuntamente con la cordobesa La Lácteo, quienes desde el depósito fiscal aduanero de Terramar, en el Parque Industrial de Villa María, despacharon 18 mil litros de leche de maní.
El trabajo en conjunto entre estas dos empresas se viene sosteniendo desde hace tiempo con dos objetivos: Las partes se acercaron para generar un producto para el mercado interno, que se comercializa bajo la marca Pitey; pero también pensado en el comercio internacional y la demanda que este alimento tiene en distintas partes del mundo.
Días atrás, desde Córdoba, habían concretado otra exportación. Concretamente, estiman que en unos 45 días las leches de maní se encuentren en las góndolas de una cadena de distribución de del país oceánico.
Además, reconocieron que se encuentran en tratativas para poder poner este producto en otros destinos, como Chile, Uruguay y China.
Renato Lorenzati, director de la firma ticinense, destacó en primera instancia el trabajo y la inversión que La Lacteo realizó para poder transformar y adecuar sus líneas de producción para empezar a elaborar este nuevo producto.
En ese sentido, Martín Filippi, gerente de operaciones comerciales de la firma cuya planta industrial está ubicada en Villa del Rosario, explicó que “se ha hecho una inversión importante en instalaciones para poder generar el producto y realmente ha sido un sueño cumplido”.
Casi dos años de trabajo previo hay detrás de esta exportación, y es el resultado de la visión de dos empresas que están convencidas de que el consumo de este tipo de productos en nuestro país seguirá creciendo.
“La novedad del producto está en la base vegetal. El desarrollo de productos vegetales a nivel mundial está instalado, pero en Argentina es un producto bastante nuevo, no lleva muchos años”, puntualizó Lorenzati.
Filippi confirmó que actualmente las bebidas vegetales componen el 30% del volumen de producción total de la compañía.
“Nosotros no dejamos de ser productores de lácteos y la línea de bebidas vegetales es completamente independiente, y ese fue el desafío más grande con un sistema de gestión y de calidad completamente diferencial y fue creciendo de manera exponencial. El desafío de llevar esto de la tierra a la góndola se está cumpliendo y más rápido de lo que pensábamos”, cerró.