Desde hace 12 años, José Ignacio Carassai se dedica a la producción de quesos en Lácteos Las Tres, una empresa familiar fundada en 1989.
Asimismo, formó parte de la Unión Industrial de Córdoba en el Departamento Joven y, actualmente, se desempeña como secretario de Apymel.
A lo largo de su trayectoria profesional, el joven de 29 años participó en diversas cámaras de trabajo, donde tuvo contacto con empresarios de gran envergadura y otros que, al igual que él mismo, estaban iniciando su camino en el mundo de los negocios.
Fue en esta clase de espacios donde José Ignacio notó que “hay una brecha generacional existente” entre las personas que forman parte del directorio de las empresas.
“Desde muy chiquito participé en distintas cámaras, dónde pude abrir mucho la cabeza y entender de qué se trata el mundo empresarial. Allí, noté que había poca presencia de jóvenes, me refiero a menores de 35 años”, contó el empresario.
A su vez, agregó: “Se nota el cambio generacional, pero no es que los jóvenes venimos con ganas de romper lo que está hecho y hacer algo nuevo, sino que buscamos imponer nuestra propia impronta a la realidad”.
También mencionó que “hay que reconocer el esfuerzo que han hecho los empresarios más grandes para tener la base que tenemos hoy en día, pero, en algunos casos, deben aprender a dejarnos participar”.
“Es importante que los más grandes brinden espacios para los jóvenes”, remarcó.
En el caso de Apymel, José Ignacio destacó que “en la última Asamblea General no ordinaria se decidió que una persona menor de 35 años por provincia va a poder participar dentro de las reuniones de la junta directiva”.
“Hay que mencionar que, habitualmente en las juntas directivas de las distintas organizaciones, quienes ocupan esos roles suelen tener un promedio de 65 años”, relató el empresario y continuó: “Por eso es importante proponer nuevos espacios donde puedan converger las distintas generaciones y buscarle una vuelta de rosca a los problemas que afrontan las organizaciones”.
Familia empresaria
José Ignacio es el cuarto hijo de la familia Carassai. Junto a sus tres hermanas mayores llevan adelante la toma de decisiones de la empresa y apuestan por innovar día a día.
Actualmente, además de producir distintas variantes de queso en la localidad de Tío Pujio, Lácteos Las Tres ofrece un cata de quesos en su showroom en Villa María.
En relación a la dinámica empresarial-familiar, el joven destacó que “a veces cuesta diferenciar los temas familiares de los negocios, pero siempre buscamos lo mejor para la empresa”.
“En mi caso, cuando terminé la secundaria comencé a trabajar y en paralelo fui haciendo cursos y capacitándome, por ejemplo en una diplomatura en gerenciamiento empresarial y, por supuesto, en todo lo relacionado a la producción de quesos. He viajado a Italia y Alemania, donde pude aprender sobre distintas maquinarias y formas de producción”, precisó.
AERCA joven
“Hoy en día también formó parte en la Cámara de AERCA Joven, que se consolidó hace poquitos meses, y estoy muy contento porque puedo transmitir el conocimiento que adquirí en otras cámaras, pero ahora a nivel local”, mencionó José Ignacio.
De igual manera, agregó: “Es una forma de compartir entre jóvenes y ayudarnos mutuamente entre todos”.
Tras consultarle por los objetivos de la Cámara, el empresario distinguió la formación de quienes participan “como futuros dirigentes”.
Por otra parte, explicó que buscarán avanzar en Big Data para optimizar la obtención de datos de los negocios locales.
En paralelo, Carassai mencionó que también prevén trabajar en la internacionalización de los comercios.
“El mundo se está abriendo y ya no es tan loco pensar en que una empresa quiera abrir una fábrica en Chile o Uruguay. Pero, para eso, primero que nada, hay que tener contacto con la Cámara de Comercio de dicho país y a eso apostamos”, indicó.
Igualmente, explicó que “ese contacto también nos serviría para tener datos concretos y poder compararlos con el trabajo local”.
“Villa María es una ciudad muy linda, que viene creciendo y tiene empresas muy variadas. Además, por su ubicación, la veo como un centro y una ciudad que está preparada para asistir y atender. Entonces, tiene capacidades y promete por lo que apostamos a seguir trabajando”, señaló.
Habilidades y desafíos
Al hablar sobre las habilidades que José Ignacio piensa que deberían contar los jóvenes empresarios, detalló: “Nosotros somos seres que estamos en comunidades y, muchas veces, hay situaciones que no elegimos, pero debemos saber sobrellevar. Por eso, creo que las habilidades blandas son imprescindibles para pensar y accionar ante las problemáticas diarias”.
“Los jóvenes vivimos en un mundo súper acelerado, donde todo lo queremos para ya o para ayer incluso. Entonces, también hay que saber sortear entre lo inmediato, lo finito y pensar a largo plazo”, aseguró.
Sin embargo, destacó: “Si los jóvenes tienen ideas, es porque están viendo algo que otros no. Así que, más allá de las habilidades, también hay que intentarlo”.
“Desde que empezás, es decir, del 0 hasta tu objetivo, tenés un 35% que lo podés conseguir gratis. Es decir, con averiguaciones, recolectar información que está a un click de distancia, hablar con personas con experiencia, sin hacer ninguna inversión”, comentó José Ignacio.
Añadió, sobre ese aspecto, que “este proceso inicial te va a permitir ir construyéndote a vos mismo, tus propias ideas y, en base a eso, formar nuevas vivencias y experiencias”.
“En mi caso, me gusta ser industrial, me gusta producir y trabajar en la empresa familiar por lo que mi idea es potenciar Lácteos Las Tres y que la segunda generación, tanto mis hermanas como yo, logremos mejorar las calidades de puestos de trabajo de cada uno de los integrantes”, concluyó Carassai.