Grupo Don Emilio, en dos de sus unidades de negocio, la fábrica láctea Duy Amis y el tambo robotizado Mharnes, dio un paso clave en su compromiso con la sostenibilidad: midió por primera vez su huella de carbono.
El estudio fue realizado por Cauce Ingeniería Ambiental, a cargo de la ingeniera Abril Trucchi y el ingeniero Manuel Duhau Eberhardt, y convierte al grupo en una de las primeras empresas de la provincia en hacerlo.
Y será la primera industria láctea y tambo en inscribirse en el Registro Provincial de Huella de Carbono
Pioneros y con compromiso
La medición permite identificar las principales fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero dentro de cada unidad productiva.
En ese sentido, Trucchi explicó que en Duy Amis, el 75% de las emisiones proviene del consumo de energía, mientras que en Mharnes más del 80% se origina en las actividades agropecuarias y ganaderas.

El relevamiento también evidenció que el grupo ya viene implementando acciones concretas de mitigación.
En el eje energético, la instalación de paneles solares representó un 16% de emisiones evitadas gracias al uso de energía limpia y renovable.
“Incluso antes de medir su huella, la empresa ya venía tomando decisiones orientadas al cuidado del ambiente”, destacó Trucchi, al hacer referencia que, mediante los paneles, la firma inyectó 30.000 kWh de energía limpia/renovable a la red.
Entre ellas se encuentran también la barrera forestal existente en el campo y el compromiso de ampliar la forestación para, en el futuro, medir también la captura de carbono que representan esos árboles.
Un proceso a largo plazo
La ingeniera subrayó que la medición es “el primer paso de un trabajo a largo plazo”. A partir de los resultados, Grupo Don Emilio establecerá ahora planes de acción enfocados en eficiencia energética, optimización de recursos y valorización de residuos, buscando ampliar el impacto ambiental positivo.
“Medir la huella de carbono habla del compromiso ambiental real de la empresa, más allá de las exigencias normativas. Hoy no es obligatorio hacerlo, y eso refuerza su rol pionero y de compromiso con el ambiente”, añadió Trucchi.
Según explicó la ingeniera, Duy Amis y Mharnes “van a ser la primera industria láctea y tambo en inscribirse en el Registro Provincial de Huella de Carbono”.
Este registro, impulsado por el Gobierno de Córdoba, reconoce a las empresas que voluntariamente evalúan y gestionan sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
“Ponerle número a lo que ya se viene haciendo”
Desde Grupo Don Emilio destacaron que este paso significa reafirmar un compromiso que ya forma parte de la identidad de la empresa.
“Esto simplemente es ponerle número a lo que se viene haciendo. Más allá de la cantidad y calidad de acciones que impulsamos en favor de la economía circular —que es un compromiso 100% asumido— ahora tenemos un número que le da objetividad absoluta a todo el proceso, y nos permitirá trabajar para mitigar la emisión que produce nuestra actividad”, expresaron autoridades del grupo.

También remarcaron que esta práctica “ya se aplica en otros países y forma parte de la agenda de objetivos de la ONU”.
“Hay que entender que parte de esas emisiones son intrínsecas a la actividad —explicaron—, pero sí se puede pensar en cómo balancearlas con la captación de carbono. Nuestro sueño es mitigar lo más posible nuestra emisión y, aunque sea difícil o parezca lejano, algún día alcanzar una emisión cero. Creemos que con el tiempo esa posibilidad irá aumentando”, apuntaron.
Un liderazgo que trasciende
Con esta iniciativa, Grupo Don Emilio —a través de Duy Amis y Mharnes— reafirma su posición como industria láctea cordobesa de transitar un camino productivo basado en la innovación, sostenibilidad y responsabilidad ambiental a lo largo de su trayectoria productiva.
Desde la empresa, resaltaron que se trata de un punto de partida para, de ahora en más, tener parámetros que permita saber cuál es el impacto que se genera y cómo mitigarlo mediante acciones diversas que se tomaban y se van a empezar a tomar.






