Escribe: Alfredo Koncurat | Titular de EKO Consultora – Experto Pyme.
La Gestión del Cambio es un enfoque que tiene como objetivo ayudar a las organizaciones a adaptarse constantemente a los cambios del mercado; esta orientación se vale de las personas que forman parte de una empresa con el fin de minimizar la resistencia que podría afectar los cambios que la organización requiere para su crecimiento y evolución.
La realidad nos muestra que la mayoría de las empresas suelen ser conscientes de que necesitan hacer ajustes a su organización, sin embargo, esto no resulta tan sencillo: La actualidad es cada vez más dinámica y compleja y desafía de forma constante a las organizaciones.
Cambios en la empresa
Las transformaciones generan profundos impactos en una empresa, pero estas ocurren solo si el terreno es fértil y está correctamente abonado, preparado.
Es muy importante antes de comenzar con la implementación de las acciones el tener en cuenta los elementos que suelen atentar contra el resultado positivo del plan.
Es frecuente que los proyectos de gestión de cambio organizacional no alcancen sus objetivos por fallas en la planificación estratégica; por falta de liderazgo o por falta de compromiso de los equipos de trabajo.
En las organizaciones los cambios son provocados con el fin de cumplir con objetivos, es decir, con alcanzar una situación deseada.
Para esto, es conveniente plantear un plan que contemple las implementaciones y estime las resistencias en la organización, que son las fuerzas que bloquean o entorpecen por múltiples motivos la adaptación de la empresa a una nueva situación, es decir, son los elementos que atentan contra el cambio.
¿QUÉ ES LA GESTIÓN DE CAMBIO?
La gestión de cambio es un enfoque sistemático que se vale de las personas que forman parte de una empresa, con el fin de minimizar la resistencia que podría afectar los cambios que la organización requiere para su crecimiento y evolución.
Importancia de la gestión de cambio
La realidad hoy es tan compleja que nos atraviesa de forma transversal. La información y los adelantos tecnológicos avanzan en forma acelerada, por tal motivo la capacidad que tenga una organización de poder adaptarse lo más rápidamente posible a las nuevas tendencias será un valor intangible crucial para la generación de valor.
Para que los cambios que se desean incorporar sean asimilados exitosamente, es vital que los miembros de la organización realicen sus aportes y haya una retroalimentación constante.
Es aquí cuando hablamos de una gestión del cambio inclusiva.
Es importante que una empresa y sus líderes tengan en cuenta que los cambios son constantes y necesitan moverse para seguir alcanzando objetivos y metas.
El enfoque de mejora continua no permite la relajación en las organizaciones, por eso es crucial la capacidad de asimilar nuevas pautas, nuevos métodos, nuevas formas de hacer las cosas que nos permitan ser más productivos.
La gestión de cambio es un enfoque que resulta fundamental para establecer quiénes formarán parte de esta estrategia, quiénes serán los encargados de tomar decisiones y de qué manera se llevarán a cabo los cambios.
Proceso de gestión del cambio: 7 pasos
- Determinar qué se necesita cambiar y elaborar el mensaje.
- Identificar a las personas interesadas y la forma de gestionarlas.
- Comunicar sistemáticamente.
- Organizar pasos incrementales.
- Equipar a los gerentes para manejar la respuesta emocional al cambio.
- Administrar objetivos y resultados clave.
- Continuar priorizando la comunicación.
Gestión del cambio de procesos
Desde la consultoría por lo general la Gestión de Cambio es requerida cuando una empresa necesita incorporar nueva tecnología, es decir, nueva forma de hacer las cosas sea por adquisición de máquinas, por el acondicionamiento de un nuevo espacio físico o simplemente para mejorar el control de un proceso en la cadena de valor.
Cualquiera de estas situaciones o combinaciones de ellas, requiere de nuevas pautas y una serie de capacitaciones con los empleados.
La resistencia por temor, por desconocimiento o simplemente por falta de adaptabilidad es muy común, por lo cual resulta crucial el manejo adecuado de los cambios propuestos, sopesar el estrés lógico por los que pasará el personal involucrado.
Por ello, la Gestión de Cambio se vuelve un método eficaz para transmitir el mensaje correcto de la forma adecuada a las personas.
Aquí resulta clave poder identificar quienes son los actores que acompañan y quienes obstaculizan los cambios propuestos, por incapacidad, por falta de conocimiento o por falta de interés.
Finalmente, tener muy en cuenta que la correcta administración del cambio resulta responsabilidad de quien/es lidera/n los cambios, y para lograr buenos resultados es fundamental que los directores den el total apoyo al plan.
De lo contrario se corre el riesgo de tropezar en marchas y contramarchas que desgastan a las personas involucradas y refuerzan las viejas prácticas que en ocasiones de forma “tautológica” no permiten la evolución de la organización.
