El balance que realizaron del 2022 desde la Asociación de Empresarios de la Región Centro Argentino (AERCA) es, en rasgos generales, negativo.

Juan Carlos Jacobo, presidente de la gremial empresaria, calificó el año que pasó como “bastante complicado”, y expresó las razones.

“El problema se ha generado sobre todo con el abastecimiento de materia prima, precios, fue muy difícil para el sector comercial e industrial”, puntualizó.

En ese sentido, planteó que “sobre todo viniendo de una pandemia, más allá de que los niveles de actividad han sido importantes, los números a nivel general dieron saldo negativo a comparación con el año pasado”.

Consultado sobre el contexto general a nivel nacional, no dudó en afirmar que “lo único que ha habido son palos en la rueda de parte del Gobierno Nacional”.

“Y fue hasta el último momento con el gran regalito de navidad que nos dieron decretando feriado por el festejo del mundial y luego el bono de fin de año”, recordó.

“Insistimos, no estamos en desacuerdo y sabemos la situación del sector asalariado, pero el problema radica en que no estamos de acuerdo con la imposición y decretar cuestiones que nos saquen de los esquemas, improvisando, a los ponchazos”, lamentó Jacobo.

“Tenemos nosotros nuestro lugar para acordar el tema de los salarios que son las negociaciones con los gremios cuando hay paritarias y esos son los lugares. Lo mismo decretar un feriado… no sé si era tan necesario al menos en las provincias del interior”, cuestionó.

Qué esperar del 2023

El presidente de AERCA planteó que espera “un año raro por todo el panorama electoral, tanto local, provincial como nacional” en 2023.

Esto, sobre todo, teñido por “la falta de información y de políticas, políticos e ideas sobre todo sobre qué va a haber el año que viene”.

“El sector empresarial siempre dice que nos gusta trabajar en panorama de certidumbre para poder planificar a futuro y en base a eso armar tu plan de trabajo. Y en este país lo que menos tenemos es ese panorama”, subrayó.

Finalmente, insistió en que “independientemente el partido que gobierne, nos gustaría ponernos de acuerdo en 4 o 5 puntos básicos, que respeten eso y permitan trabajar tranquilos; en función de eso poder saber cuáles son las reglas del juego”.